joinfo.ua
Los hombres a lo largo del tiempo han sido los más desesperados por realizar el acto sexual. Es tal vez su impulso de fecundar a toda hembra que ven; es tal vez el sentimiento de escasez femenina en sus vidas; quién sabe. Lo que está claro para todo el mundo es que andan urgidos, y quizá eso explique que al momento del faenón manifiesten estos terribles defectos.
1- Guiarse del porno
Es fácil para cualquier mujer reconocer que hombre posee abundancia sexual o abundancia de papel higiénico al lado de la PC. El pornero que folla solo cuando puede se delata con cada acto que hace o pretende hacer: dar besos bruscos, nalguear sin ton ni son desde los primeros momentos, echar el pene a la cara toscamente para que se la chupen, lamer la vagina a lo bruto, meterla también a lo bruto alucinándose el calvito de Brazzers, etc.
Se les ve el plumero porneril con cada detalle. Lamentablemente ninguna les ha dicho que follando así no repetirán el plato, y que para colmo se ganarán malas referencias. Este tipo de pésimos empotradores abundan en redes de ligoteo tipo Badoo o Tinder, de ahí que sea mala idea para toda chica pillar algo ahí.
2- Ignorar los previos
Reducir el sexo a las mamadas y a la penetración es una animalada propia del pornero, pero no solo solo suya, sino del mal amante en general. Lamentablemente para ellos, el sexo es algo de a dos, y la mujer necesita ser estimulada antes del coito para garantizar un polvazo. Y vamos, que tampoco significa pasarse de meloso con palabras al oído o caricias, que con los dedos y labios se puede hacer magia.
3- Ir contra el tráfico sin avisar
Es momento de que lo asuman de una vez: difícilmente una mujer acepta de buenas a primeras que le metan el dedo, lengua o miembro por atrás sin avisar o sin esperar "el momento correcto" para probar si resultará ¿y cuál es el momento correcto? Pues si te guías del porno e ignoras los previos, nunca sabrás leer el lenguaje corporal femenino. Por desgracia para ustedes, las mujeres del mundo real no son unas locas adictas al sexo anal.
4- Hacer preguntas tontas durante
"¿Te está gustando?", "¿lo quieres así?", ¿cómo quieres que lo haga?", etc. Si incurres en esto, felicidades, eres un mata pasiones profesional. Tal vez tu intención sea que te ayuden cómo hacerlo mejor y superarte cada día como amante, pero a ninguna mujer le gusta un hombre inseguro y poco experimentado. Es algo que tendrás que superar por cuenta propia.
5- Hacer preguntas tontas después
"¿Te gustó?", "¿lo hice bien?" "¿está bien que lo haga así a la próxima?", etc. Estos tipos son por mucho los peores; superan en patetismo a los que preguntan esta clase de cosas durante el sexo. Denotan aun más inseguridad e infantilismo que un niño de ocho años fumando.
4- Hacer preguntas tontas durante
"¿Te está gustando?", "¿lo quieres así?", ¿cómo quieres que lo haga?", etc. Si incurres en esto, felicidades, eres un mata pasiones profesional. Tal vez tu intención sea que te ayuden cómo hacerlo mejor y superarte cada día como amante, pero a ninguna mujer le gusta un hombre inseguro y poco experimentado. Es algo que tendrás que superar por cuenta propia.
5- Hacer preguntas tontas después
"¿Te gustó?", "¿lo hice bien?" "¿está bien que lo haga así a la próxima?", etc. Estos tipos son por mucho los peores; superan en patetismo a los que preguntan esta clase de cosas durante el sexo. Denotan aun más inseguridad e infantilismo que un niño de ocho años fumando.
www.taopic.com
No hay comentarios:
Publicar un comentario